jueves, 20 de enero de 2011

¿QUE NECESIDAD HAY DE VENDER HUMO, SI LAS FABRICAS LO DAN GRATIS?

Hace poco menos de dos años -un par de meses antes de las elecciones legislativas de 2009-, apareció una gigantografia en los terrenos del Hospital Larcade, con el anuncio y la imagen del nuevo edificio hospitalario. El dibujo mostraba una construcción vidriada y muy moderna, al estilo “los supersónicos”.

El 20 de julio de 2009 y el día 24 del mismo mes y año se realizó la apertura de sobres de la licitación del NUEVO HOSPITAL LARCADE (ver publicación en la web del gobierno municipal).

Pocos días después y ante las evidentes irregularidades del acto licitatorio de la reforma hospitalaria, el HCD de San Miguel aprobó un PEDIDO DE INFORMES a fin que el Ejecutivo municipal despeje dudas sobre varios puntos de dicho llamado. El autor del proyecto –el concejal Hipólito Fuentes-, entre otras cuestiones, solicitaba: que se remitan al HCD las copias de publicación de la obra, los pliegos de bases y condicione para determinar claramente el monto del proyecto, la duración de la obra y la fecha de inicio de la misma, los antecedentes: planos y estudios, y los contratos para su financiamiento; asimismo se peticionaba sobre el encuadre legal por el cual se otorgaba a la empresa adjudicataria la exclusiva dirección ejecutiva de la obra y aclaraciones derivadas de la modalidad de contratación por ajuste alzado. Muchas dudas para un solo proyecto...

En la madrugada del viernes 18 de septiembre de 2009, se cayó de gigante cartel que anunciaba la faraónica obra. Quizá ese fue un aviso que también se había caído una ilusión armada como una mera promesa electoral... Desde aquella apertura de sobres licitatorios ha pasado un año y medio y nada ha pasado.

La historia vuelve a repetirse; poco antes de las elecciones de 2007, el entonces intendente Zilocchi colocaba un cartel en el predio "El Colibrí", que decía que en ese lugar se construiría el NUEVO HOSPITAL DE SAN MIGUEL.

Dos intendentes, dos campañas electorales, dos hospitales, dos promesas incumplidas y mucho humo vendido.

¿Que necesidad hay de venderlo, si las fabricas lo dan gratis?

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