(REEDICION)
TRABAJAR DE PERONISTA
Hoy es el DIA DEL MILITANTE PERONISTA, un día donde se potencia lo NACIONAL y POPULAR, porque hace cuarenta y cuatro años los militantes lograron que el GENERAL regrese a nuestro país.
Hoy es un día de orgullo para la militancia Peronista, algo que solo lo puede entender un militante de verdad.
Sin embargo, por estos tiempos, somos todos Peronistas (al menos desde la declamación). El Peronismo del siglo XXI tiene la particularidad de haber aceptado que el antiperonista integre nuestro movimiento: Cabecitas negras y Gorilas... Liberales y Zurdos... Oligarcas y Pobres... Intelectuales y Brutos... Laburantes y Especuladores... Honestos y Delincuentes... Demócratas y Golpistas... Todos en la misma bolsa: PORQUE SOMOS TODOS PERONISTAS.
Pero no todos sienten al Peronismo de la misma manera. Muchos trabajan de Peronistas, y si bien eso les permite convertirse en multimillonarios, es un trabajo insalubre. Dicha insalubridad, se agiganta en los días como el DIA DEL MILITANTE, porque hay que saludar a todos esos gronchos, negros de alma, sucios, brutos y vagos... Tienen que saludarlos para mantener su trabajo de Peronista, porque cada dos años hay elecciones y los van a necesitar; cada dos años les dicen que ellos son la principal preocupación de sus vidas...
No debe ser fácil trabajar de Peronista, los gronchos les dan asco. Pero si esos grasas dejan de ser pobres no los votarían y perderían su trabajo de dirigente. Así que de vez en cuando los deben abrazar, besar, saludar -aguantando la respiración para que no los descomponga el olor a negro pobre-, de paso entre abrazo y repugnancia deben pensar que les dicen para justificar que nada hacen por el Pueblo empobrecido. Ellos piensan que el Peronismo y Perón, son lo peor que le pudo haber pasado a la Argentina y lo mejor que le puede haber sucedido a sus bolsillos.
Trabajar de Peronista es un ARTE
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