HABLEMOS CLARO

Días pasados nos llegó -vía mail- una publicación web con un análisis aparentemente critico de este blog, decimos "aparentemente" porque ese escrito de opinión estaba plagado de frases rimbombantes, metáforas absurdas y expresiones soporíferas, que hacían inentendible el mensaje que portaba dicho texto.

Igualmente leimos minuciosamente ese artículo y lo hubiesemos publicado en este blog para generar algun debate; pero decidimos no hacerlo para no aburrir a nuestros lectores con frases rebuscadas y confusas.

A este sitio lo caracteriza  una escritura sencilla y directa; no necesitamos disfrazarnos de pseudo intelectuales con palabras altisonantes, ni firuletes narrativos, ya que ese estilo de escritura bien puede ser aceptado en obras de ficción; pero jamas cuando se trata de explicar cómo funciona el mundo real, en ese caso es obligación del escritor comunicar sus reflexiones de la manera más accesible posible.

Muchas veces, quien no tiene claridad en sus ideas recurre a palabras raras, pensando que ese adorno le da un aire más culto a su texto. Sin embargo, diversos estudios e investigaciónes sugieren que inundar un escrito con vocablos inauditos y “cultos”, no hace que los lectores consideren más inteligente al autor, sino todo lo contrario.

La complejidad del vocabulario utilizado, el habla erudita empleada sin necesidad y los textos deliberadamente herméticos, dan una mala impresión y adormecen a los interlocutores. Para colmo, quienes solo pueden dar a conocer su parecer vistiéndolo con sus mejores galas, simplemente evidencian que no tienen mucha idea de lo que dicen.

El autor de ese análisis critico hacia nosotros, ha escrito de manera intencionadamente incomprensible, con construcciones sintácticas incoherentes, con uso infinito de metáforas exageradamente poéticas y con guiños culturales minoritarios -que dan por sentado que el lector es tan leído como el escritor-; por lo tanto, en su búsqueda de maquillar su texto con aparente refinamiento lingüístico, ha incurrido en vicios expresivos que desnudan una obra vacia de contenido.

En síntesis ese escrito de opinion no podía ser publicado en este espacio web porque era sumamente enredado, rebuscado, aburrido y pedorro.