lunes, 6 de agosto de 2012

POR UN DIA DEL NIÑO SIN CLIENTELISMO POLITICO




El próximo domingo se celebra el DIA DEL NIÑO, momento en que lamentablemente casi todos los sectores políticos saldrán a medir fuerzas en sus respectivas convocatorias; desvirtuando -al extremo- un momento que no solo debería ser festivo; sino -y ante todo- de profunda reflexión de quienes nos consideramos hombres políticos y la primer pregunta que deberíamos formularnos es:

¿Qué hacemos por los niños los 364 días restantes al festejo del segundo domingo de agosto?

En realidad para los PERONISTAS los 365 días del año son de los niños, de hecho, los derechos del niño, han sido uno de los pilares de equidad social del Peronismo.

¿Lo siguen siendo?

Si cada unos de nosotros piensa que si que particularmente lo hacemos, no solo estaríamos mintiendo , por los resultados a la vista; sino que estaríamos anteponiendo lo individual a lo colectivo.
Chocolates, volantes proselitistas, caramelos, afiches de algún político, juguetes, payasos, vehículos ploteados con la cara de un candidato, peloteros, pasacalles políticos, música infantil y partidaria; se mezclaran en cada lugar de reunión en una ensaladera gigante de clientelismo político y de incompatibilidades.
Una de las 20 verdades peronistas se dirige a los niños, incluso el peronismo le dio rango constitucional a sus derechos, en la Constitución social de la Nación Argentina de 1949.

¿Hoy podemos seguir diciendo "Los únicos privilegiados son los niños"?


3 comentarios:

Daniel Rodríguez dijo...

Ruben, tenes parte de razón en lo que escribís, pero gracias a Dios los niños, por lo menos en su día, no tendrán que pagar los errores y las limitaciones de sus mayores sean políticos o no, ayudemos pues a los que de una u otra forma agasajarán a los "pequeños gigantes"
Seguramente cuando sean grandes recordaran con la misma alegría esos momentos. He participado en este tipo de eventos y no creo que todos pienses en una ventaja política. Siempre habrá quienes busquen el rédito ante la sociedad, pero quiero creer, necesito creer que la mezquindad moral no sea la heredera de nuestras generaciones. Por ultimo y como dije antes yo recuerdo esas fiestas de la infancia por mi Mendoza natal, recuerdo la alegría, el chocolate, las tortitas de grasa y las "sopaipillas" recién echas con azúcar espolvoreadas y si tenías suerte con un poco de "arrope" de uva. También recuerdo de esos días del niño los campeonatos de barriletes, "volantines" les decíamos nosotros, hechos con cañas secas, papel de diario y el engrudo con harina que le afanábamos a la vieja.
Puedo asegurar, quedate tranquilo, que de ese día no tendrán ningún recuerdo del político que les regalo un juguete y les entregó un alfajor o un pancho.
No Ruben, ellos solamente recordaran el chocolate caliente, la cola para recibir el juguete, la alegría de compartir el pelotero, los increíbles trucos del mago y la infinita y contagiosa risa del payaso,
Saltaran embolsados, correrán con el huevo en la cuchara, saltaran en “tres patas”, en fin participaran en cientos de juegos….Pero Ruben será su fiesta , de ellos de nadie mas.
Participemos…. con cualquiera…sea compañero o no olvidémonos este día con quien, colaboremos sabiendo entonces para que y quienes, no les robemos ese momento, no seamos egoístas, vos nos recordas permanentemente la lección, “Los únicos privilegiados son los niños”

RUBEN LUIS CASTEJON dijo...

Hola Daniel veo que coincidís conmigo, en la publicación dice: "DIA DEL NIÑO, momento en que lamentablemente casi todos los sectores políticos saldrán a medir fuerzas en sus respectivas convocatorias...
Logicamente hay excepciones.
Nunca dije que no hay que festejar ese dia, solo pregunto que hacemos los restantes 364.
Nos vemos.

CLAUDIO dijo...

hola Ruben la verdad coincido con vos, en que no se mira nunca el fondo de la cuestion ( los niños) si no que por parte de los politicos se esquiba lo que seria que los chicos no van al colegio por no tener zapatillas, utliles escolares, la alimentacion y muchas cosas mas que todos sabemos; y ahora se puso de moda para los politicos regalar juguetes, peloteros, etc. pero nunca las cuestiones de fondo. VIVA PERON, VIVA EVITA.

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