Si bien en términos generales comparto lo expresado por el autor del análisis (publicado en este blog en el día de ayer), hay temas puntuales en los que debo diferenciarme del texto de Renés.
Ya en el titulo mismo necesito marcar alguna diferencia: cuando el autor dice "una organización municipal burocrática...", debo entender que se ha utilizado el termino en su versión popular-peyorativa. En ese caso entiendo que la burocracia esta siendo presentada como una desvirtuación de la organización, cuando en realidad es un sistema organzativo -quizá el menos imperfecto-. Me imagino que el autor del texto ha querido expresar que: la administración municipal de San Miguel es un sistema organizacional que dista mucho de ser una burocracia weberiana. En esta ultima prima la división administrativa entre el sector político y el sector técnico, mientras que el gobierno municipal local -debido a su debilidad institucional, la carencia de recursos económicos, la fragilidad de sus estructuras administrativas, y la ausencia de recursos humanos profesionales y suficientemente capacitados para la función gubernamental-, se muestra como una seudoburocracia, todo ello agravado por la alarmante confusión de lo publico y lo privado. Por consiguiente es necesario dejar claramente establecido que la "burocracia" es el sistema organizacional que impera en el mundo, lo malo es que en los municipios en general y en especial en el de San Miguel, no se ha llegado a conformar una burocracia pura, según los parámetros establecidos por Max Weber, así se ha privilegiado un sistema seudoburocratico, es decir un sistema de precariedad estructural y funcional. Donde -y a partir de ese entonces- los municipios pueden ser considerados instancias prácticamente minusválidas para la función gubernamental. Por mi parte creo oportuno realizar esta aclaración, de lo contrario se caería en el riesgo de pensar que la burocracia es la madre de todos los males. Sin embargo imagino que el autor no ha pretendido desvirtuar el termino "burocracia", sino solo hacer referencia a las incapacidades de la seudoburacracia de San Miguel; descripción de la cual comparto plenamente.
En cuanto al detalle de las ineficiencias de la administración municipal, coincido en su gran mayoría. Pero, por mi parte, no tomaría al personal de planta como causa de la ineficiencia administrativa, sino como efecto de la misma. Esto es así porque no se vislumbra un sistema de selección adecuado, ni incentivos de capitación, ni métodos de valuación de desempeño, entre otros factores no menos importantes. Es oportuno recordar que fui el encargado de realizar la transición de gobierno -en cuanto a recursos humanos- de Zilocchi a De La Torre, y que dicha tarea la lleve adelante como parte del equipo del ultimo de los nombrados. Después de un mes de estudio del sector, y habiendo trabajado mas de doce horas por día, le presente al actual intendente -poco tiempo antes de su asunción- un diagnostico del area y las medidas -que a mi entender. había que tomar al respecto del personal. Para ser breve y sintetizar al máximo aquel informe, recomendaba el cambio del sistema escalafonario municipal, con ascensos verticales y horizontales, para incentivar la capitación de los recursos humanos del municipio, asimismo proponía que se suprimiese el sistema de becarios ya que detrás del mismo se escondían trabajadores precarizados o "ñoquis". Este informe fue el principio del fin de mi relación con De La Torre. Por lo tanto entiendo que no se puede considerar al personal como causa de la ineficiencia administrativa sino como efecto de la misma, o al menos como causa/efecto.
A pesar de mis coincidencias generales con el autor del texto, debo hacer notar que en el desarrollo del mismo nuevamente se cargan las tintas contra la burocracia. Entonces bien vale una aclaración mas al respecto: A mi entender el problema de la ineficiencia municipal no radica en la abundancia de burocracia sino en su escaces. No tengo ninguna duda que el municipio seria ciertamente eficiente, si se pudiese consolidar una verdadera burocracia local.
Al margen de estas diferencias, reitero que coincido con la mayoría de los puntos trazados en el escrito de Hugo Cesar Renés
Ya en el titulo mismo necesito marcar alguna diferencia: cuando el autor dice "una organización municipal burocrática...", debo entender que se ha utilizado el termino en su versión popular-peyorativa. En ese caso entiendo que la burocracia esta siendo presentada como una desvirtuación de la organización, cuando en realidad es un sistema organzativo -quizá el menos imperfecto-. Me imagino que el autor del texto ha querido expresar que: la administración municipal de San Miguel es un sistema organizacional que dista mucho de ser una burocracia weberiana. En esta ultima prima la división administrativa entre el sector político y el sector técnico, mientras que el gobierno municipal local -debido a su debilidad institucional, la carencia de recursos económicos, la fragilidad de sus estructuras administrativas, y la ausencia de recursos humanos profesionales y suficientemente capacitados para la función gubernamental-, se muestra como una seudoburocracia, todo ello agravado por la alarmante confusión de lo publico y lo privado. Por consiguiente es necesario dejar claramente establecido que la "burocracia" es el sistema organizacional que impera en el mundo, lo malo es que en los municipios en general y en especial en el de San Miguel, no se ha llegado a conformar una burocracia pura, según los parámetros establecidos por Max Weber, así se ha privilegiado un sistema seudoburocratico, es decir un sistema de precariedad estructural y funcional. Donde -y a partir de ese entonces- los municipios pueden ser considerados instancias prácticamente minusválidas para la función gubernamental. Por mi parte creo oportuno realizar esta aclaración, de lo contrario se caería en el riesgo de pensar que la burocracia es la madre de todos los males. Sin embargo imagino que el autor no ha pretendido desvirtuar el termino "burocracia", sino solo hacer referencia a las incapacidades de la seudoburacracia de San Miguel; descripción de la cual comparto plenamente.
En cuanto al detalle de las ineficiencias de la administración municipal, coincido en su gran mayoría. Pero, por mi parte, no tomaría al personal de planta como causa de la ineficiencia administrativa, sino como efecto de la misma. Esto es así porque no se vislumbra un sistema de selección adecuado, ni incentivos de capitación, ni métodos de valuación de desempeño, entre otros factores no menos importantes. Es oportuno recordar que fui el encargado de realizar la transición de gobierno -en cuanto a recursos humanos- de Zilocchi a De La Torre, y que dicha tarea la lleve adelante como parte del equipo del ultimo de los nombrados. Después de un mes de estudio del sector, y habiendo trabajado mas de doce horas por día, le presente al actual intendente -poco tiempo antes de su asunción- un diagnostico del area y las medidas -que a mi entender. había que tomar al respecto del personal. Para ser breve y sintetizar al máximo aquel informe, recomendaba el cambio del sistema escalafonario municipal, con ascensos verticales y horizontales, para incentivar la capitación de los recursos humanos del municipio, asimismo proponía que se suprimiese el sistema de becarios ya que detrás del mismo se escondían trabajadores precarizados o "ñoquis". Este informe fue el principio del fin de mi relación con De La Torre. Por lo tanto entiendo que no se puede considerar al personal como causa de la ineficiencia administrativa sino como efecto de la misma, o al menos como causa/efecto.
A pesar de mis coincidencias generales con el autor del texto, debo hacer notar que en el desarrollo del mismo nuevamente se cargan las tintas contra la burocracia. Entonces bien vale una aclaración mas al respecto: A mi entender el problema de la ineficiencia municipal no radica en la abundancia de burocracia sino en su escaces. No tengo ninguna duda que el municipio seria ciertamente eficiente, si se pudiese consolidar una verdadera burocracia local.
Al margen de estas diferencias, reitero que coincido con la mayoría de los puntos trazados en el escrito de Hugo Cesar Renés
Rubén Luis Castejón
3 comentarios:
Castejon deja de criticar a JOAQUIN,y recorre los barrios y veras los cambios,mas baches ,mas mugre ,mas inseguridad,mas luminarias apagadas, mas mosquitos mas corsos, mas cerveza,mas alegria esto se llama gestion JOAQUIN, un plan para destruir a San Miguel.
San Miguel es un CORSO.
Otro tremendo error de los JUAQUINES BOYS, mientras el intendente esta de vacaciones como siempre. En San Miguel se clusuran boliches bailables por vender alcohol a menores. Por otro lado hacen un CORSO en la Avenida Pte Peron para la familia y ahi le venden alcohol a los menores, que kilombo este municipio. Rico apoya esto. La Porta de Vacaciones en Pinamar, otra muchachos.
AHORA UNO DE LOS NUEVOS CONCEJALES SE LE OCURRIO PONER PIEDRAS EN LAS CALLES DEL BARRIO SAN JORGE DE SAN MIGUEL, CON EL VISTO BUENO DEL MUNICIPIO. NADIE CONTROLA UN CARAJO, NO SE DAN CUENTA QUE ESTAN HACIENDO PILETONES, LAS CALLES MAS ALTAS, CUANDO LLUEVA EL AGUA SE VA A IR A LAS CASAS, DEBEN HACER COMO LAS OBRAS DEL CLUB REGATAS DE BELLA VISTA, AHI NO SE INUNDA. ESTAN DESTRUYENDO SAN MIGUEL.
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